Page 57 - VEV_71

Basic HTML Version

57
Arándano azul
Vaccinium corymbosum
Es una de las especies más
conocidas de arándano azul
(foto de la página izquierda) y
cuenta con numerosos cultivares
de maduración temprana, media
y tardía. Es una planta muy
apreciada en jardinería por sus
cualidades estéticas, gracias
a sus frutos, floración blanca o
rosada en corimbos, estructura,
y colorido del follaje en otoño.
Es nativa de Estados Unidos.
Arándano azul
Ojo de conejo
Vaccinium ashei
Oriundo del sureste norteame-
ricano, este arándano es hoy
ampliamente cultivado con fines
comerciales en todo el mundo.
Soporta el calor húmedo, vive
bien en regiones de inviernos
suaves (zonas 8-10) y puede to-
lerar cierto grado de sequía una
vez establecido. Soporta mal los
trasplantes. No es autofértil, de
modo que hay que plantarlo junto
a otras variedades o ejemplares
para asegurar la polinización.
Arándano o mirtillo
Vaccinium myrtillus
De origen europeo, el mirtillo
o
bilberry
es el único arándano
que se puede encontrar de forma
espontánea en la Península ibé-
rica; vive en áreas montañosas,
principalmente en los Pirineos.
Los frutos son más pequeños
y de agradable sabor agridulce.
TRES ESPECIES
DE ARÁNDANOS
AZULES
LOS ARÁNDANOS ROJOS
A diferencia de los azules, los arándanos rojos son
arbustos y subarbustos de hoja perenne y creci-
miento rastrero. Entre ellos destacan el
Vaccinium
oxycoccos macrocarpon
(foto de la izquierda),
llamado
cranberry
en los países de habla inglesa,
de hojas pequeñas, flores de cuatro pétalos que se
curvan hacia arriba y frutos grandes, y el
Vaccinium
vitis-idaea
(foto de abajo),
lingonberry
o
cowberry,
nativo de las regiones nórdicas, de hojas ovales y
frutos pequeños, origen de numerosos cultivares.
Las bayas son muy apreciadas por sus cualidades
nutritivas y, sobre todo, antioxidantes. En jardinería
se utilizan para crear densas masas tapizantes.
El cultivo es algo más difícil que el de sus parientes
azules porque necesitan un sustrato todavía más
ácido, completamente orgánico y más húmedo
(aunque no encharcado). Para cultivarlos en casa
es conveniente aportar todo el sustrato, en lugar de
enmendar el suelo del lugar. Se pueden cultivar en
contenedor o en zanjas que se cubrirán con turba
ácida, corteza de pino y un poco de arena de sílice.
No se podan: se deja el tapiz rastrero y se recogen
los frutos que vaya dando de manera natural.
Nuestro agradecimiento a
Lurberry,
vivero ecológico
de plantas de pequeños
frutos, por su colabora-
ción en este artículo.
Horas de frío para la floración
Para una correcta floración, los arándanos
azules necesitan acumular una serie de
horas de frío, que van desde las 100 a las
1.200 horas anuales por debajo de 7º. Si tu
zona es cálida busca variedades que ne-
cesiten menos horas de frío, como las de
Vaccinium ashei
(ver columna de la dere-
cha) o las
V. corymbosum
llamadas ‘del Sur’.
Lo ideal es plantar los arándanos en
otoño, aunque puede hacerse en cualquier
época del año, ya que se presentan con ce-
pellón. Es especialmente importante pre-
parar el terreno donde van a desarrollarse
las plantas. Asegúrate de que el sustrato sea
ligero, ácido y rico en materia orgánica.
Puedes adaptar el suelo de tu jardín utili-
zando turba rubia, arena silícea para mejo-
rar la estructura, o sulfatos de hierro.
Si no dispones de jardín, o el suelo de tu
zona no es ácido, siempre podrás recurrir
al cultivo en contenedor. El arándano ‘Sun-
shine Blue’ es quizá el más apropiado por su
tamaño para el huerto urbano, aunque cual-
quier variedad puede servir, ya que no tie-
nen un sistema radicular muy desarrollado.
Sitúa las plantas a pleno sol, pero si vives
en una región de clima cálido es mejor que
les asegures algo de sombra. Tras la plan-
tación cubre el área en torno a tus aránda-
nos con un abundante acolchado vegetal
(corteza de pino, por ejemplo): además de
resultar estético, contribuirá a mantener la
humedad del suelo y a contener el creci-
miento de malas hierbas. Ya que sus fibro-
sas raíces se distribuyen superficialmente,
los arándanos azules requieren riegos fre-
cuentes que conserven el sustrato húmedo,
aunque evitando el encharcamiento.
Los arándanos se cosechan, según la
especie y la variedad, desde junio a sep-
tiembre, o incluso más tarde.
Más información en
www.verdeesvida.es
Frutos del bosque
en la terraza
FOTOS: FLORAMEDIA; A. LENNVER; DIETMUT; SKITTLEDOG; O.HUSBY; P. BOUCHARD