BUSCA TU CENTRO DE JARDINERÍA MÁS CERCANO

Helechos y cristal, un decorativo ‘mix’

No por clásicos los helechos han perdido actualidad como plantas de interior. Cultivados en recipientes colgantes de cristal, o protegidos por una tulipa transparente, renuevan su potencial decorativo. Y, además, con una ventaja: el vidrio los protege de la pérdida de humedad que tanto necesitan para que su follaje conserve sus inigualables matices de verde y su aspecto frondoso y fresco.

Grandes contenedores de cristal con pequeños helechos en su interior cuelgan ante un gran ventanal. Copyright: Oficina Holandesa de Flores

Cuelga grandes recipientes de cristal con helechos en su interior y habrás revolucionado la decoración de un ambiente. Contenedores estancos, en vez de las cestas colgantes de toda la vida, de las que siempre se escapan algunas gotas de riego que mojan el suelo.

Los frascos de vidrio actúan como un terrario aportando algo esencial para el cultivo de los helechos: la capacidad de conservar la humedad en su interior, tan beneficiosa para estas plantas.
Además de su estética —los hay de muchos formatos—, los frascos de vidrio actúan como un terrario aportando algo esencial para el cultivo de los helechos: la capacidad de conservar la humedad en su interior, tan beneficiosa para que las frondas de estas plantas conserven sus tonalidades verdes y su frescor.

Del mismo modo, conservan la humedad a nivel de las raíces, lo cual en principio es favorable para el cultivo de estas plantas, que en su mayoría precisan un sustrato húmedo permanente. Sin embargo, húmedo no significa empapado: el exceso de agua, como sucede en general con todas las plantas, puede provocar la muerte del ejemplar por asfixia radicular o la aparición de hongos de pudrición. El riego, por lo tanto, ha de controlarse bien. Para ello basta observar a través del cristal el grado de humedad que presenta el sustrato (cuanto más oscuro, más mojado) o si se ha acumulado agua en la base.

Eso sí, es indispensable que estos helechos cuelguen en un ambiente luminoso, pero donde no les dé el sol. Junto a una gran ventana obtendrán las condiciones de luz que necesitan y se verán espléndidos.

Bajo tulipas de cristal

Una alternativa de lo más seductora, que saca partido del cristal y a la vez permite cultivar los helechos en tiesto (con sus ventajas para el riego por inmersión), es utilizar tulipas que puedan apoyarse sobre el borde del recipiente. Se consigue así un conjunto tan armónico como decorativo.

Los helechos viven bien en toda clase de recipientes, pero los menos porosos, como los de plástico, son los que contribuyen a conservar mejor la humedad del sustrato. En la foto de arriba, los helechos que no están protegidos por vidrio están colocados dentro de portamacetas de cerámica vidriada, que ocultan el tiesto.

Qué especies cultivar en cristal

Las especies de helechos más adecuadas para cultivar en contenedores de cristal son las típicas de los terrarios, que se caracterizan por su crecimiento lento o moderado y sus frondas pequeñas. Pásate por tu centro de jardinería y te sorprenderá la variedad de helechos que puedes utilizar. Entre otros:

• Distintas especies del género Adiantum, entre ellos los diferentes culantrillos, incluido uno de frondas colgantes: Adiantum caudatum.

Asplenium scolopendrium, de frondas enteras, lanceoladas (de hasta 25 centímetros) y onduladas. Y Asplenium bulbiferum, de follaje muy ligero; se distingue por emitir pequeños bulbos en la superficie de las frondas, que le permiten reproducirse.

• Algunos Platycerium pequeños, de follaje verdeazulado parecido a los cuernos de alce.

Cyrtomium falcatum, de brillantes frondas coriáceas imparipinnadas, capaz de soportar incluso el sol y más frío que otros helechos. En invierno necesita menos agua que otros si el sitio es fresco.

Didymochlaena truncatula o helecho ‘Mahogany’, de follaje bipinnado de color marrón cuando es nuevo y luego verde vivo. Es ideal para sitios con mucha luz.

Pteris quadriaurita ‘Tricolor’, en cuyo follaje verde se entremezcla el rojo de las frondas nuevas y las tonalidades anaranjadas y amarillas que van adquiriendo a lo largo del tiempo.

CÓMO CUIDAR LOS HELECHOS DE INTERIOR

“Los helechos son muy caprichosos” se suele decir. Lo son. Según el hábitat del que provengan, sus exigencias de cultivo serán distintas, especialmente si proceden de zonas frías. La mayoría de los que se cultivan de puertas adentro, no obstante, se caracterizan por estas necesidades comunes:

Luz, sin sol directo: En general prefieren la semisombra y en algunos casos incluso la sombra, lo que no significa ausencia de luz. Suelen apreciar el sol de la mañana, por ello la orientación ideal es norte o este. Los rayos directos del sol del mediodía o de la tarde pueden quemar las frondas, y la alta luminosidad que proporcionan las orientaciones sur y oeste puede resultarles excesiva.

Mucha humedad ambiental: Prácticamente todos requieren un elevado grado de humedad en el aire; algunos toleran periodos cortos de sequedad ambiental, pero las hojas se secan y amarillean. El cristal contribuye a crear una atmósfera húmeda y fresca en torno a las frondas. No se recomiendan las pulverizaciones con agua sobre el follaje.

Riego bajo control: Dales agua descalcificada o de lluvia. El sustrato se ha de mantener húmedo, pero teniendo cuidado de no encharcarlo. Antes de regarlo comprueba el grado de humedad a simple vista o tocando la superficie con el dedo; si la percibes seca es el momento de regar. Si los cultivas en tiesto podrás regarlos por inmersión, que es el método que algunos prefieren. La presencia de frondas amarillentas revela exceso de agua; las secas o marchitas, su carencia.

Temperatura moderada: En general prefieren lugares frescos y no toleran la proximidad de los radiadores. Deberías procurar que la temperatura no baje de los 14º.

Un sustrato fértil y suelto: Los helechos prefieren los suelos ligeros y ricos en materia orgánica. Pide que te recomienden el sustrato más adecuado en tu centro de jardinería.

Abono muy diluido: Solo hay que proporcionarles abono cuando están en periodo de crecimiento vegetativo, entre abril y septiembre. Lo más adecuado es un fertilizante para plantas de hojas verdes diluido en el agua de riego en una dosis reducida a la mitad de la habitual para otras plantas. El exceso de abono puede provocar quemaduras en las frondas o unas tonalidades anormalmente azuladas.

Poda de limpieza: Hay que eliminar las frondas o puntas secas, que afean o pueden servir de caldo de cultivo a plagas y enfermedades. La planta lucirá más saludable y se incentivará la emisión de follaje nuevo.

Plagas habituales: Pueden ser atacados por la araña roja (si el ambiente es muy seco) y las cochinillas algodonosa y cerosa, que deben combatirse cuanto antes con el fitosanitario adecuado.  

Actualizado el 11 de marzo de 2023.

Más información:

Ficha Culantrillo (Adiantum sp.), Verde es Vida nº66, página 38 (ver en la web).

Helechos, todo un mundo para descubrir, Verde es Vida nº52, página 6 (ver en la web).

Plantas purificadoras: aire limpio dentro de casa, Verde es Vida nº61, página 34 (ver en la web).

 

  • Cubiertos con tulipas
    Cubiertos con tulipas

    Tulipas que recuerdan las de los faroles, apoyadas sobre los tiestos: tan estético como conveniente para el cultivo de los helechos.
    Foto: Oficina Holandesa de Flores

Reportaje completo nº 74 >> página 36